Origen
En 1985 Alain Graillot compró 20 hectáreas de viñedo en Crozes-Hermitage cerca del pueblo de Pont-de-l’Isère. Por aquel entonces Crozes-Hermitage no entraba dentro de la elite del norte del Ródano. La producción de grandes vinos estaba reservada para Saint-Joseph, Hermitage, Cornas o Côte-Rôtie. La idea de hacer un vino a la altura de las denominaciones vecinas resultaba descabellado en Crozes-Hermitage. Pero Alain siempre tuvo claro que quería llevar los syrah de Crozes-Hermitage a otra dimensión. Para ello disminuyó los rendimientos drásticamente y empezó a trabajar el viñedo bajo un régimen orgánico.
Una Referencia en el Norte del Ródano
Los vinos envejecen espectacularmente bien pero también son accesibles durante su juventud. Alain Graillot es sin duda la referencia en el norte del Ródano de Crozes Hermitage y hoy en día gracias al ejemplo de Alain en Crozes Hermitage existen múltiples proyectos que buscan demostrar la tipicidad de la región.